domingo, 17 de agosto de 2014

¿Objetos y cosas se pueden reciclar, reutilizar y reparar?

Reparar. No hay nada lo suficientemente viejo o estropeado que no se pueda reparar o usar para otro fin.





 Es a partir de los albores del siglo IX, época en la que aparecen las primeras referencias de molinos de agua en tierras de alavesas, cuando se multiplicará la existencia de este tipo de ingenios, apareciendo documentados a lo largo del siglo XI en Bizkaia y durante la centuria siguiente en Gipuzkoa.
En el transcurso del siglo XVII, con la introducción del cultivo del maíz y su rápida expansión, el número de molinos se acrecentará de manera considerable, repartiéndose por todos los rincones de la geografía vasca, alcanzando su mayor apogeo a lo largo del siglo XVIII.
La decadencia de estos ingenios cuyos primeros síntomas aparecerán en las postrimerías del siglo XIX, impuesta en parte por la industrialización, se acentuará de manera irreversible a lo largo del XX, salvedad hecha durante los años de postguerra, período caracterizado por el resurgimiento temporal de la actividad en estas industrias tradicionales.
Los molinos irán poco a poco parando sus piedras, siendo en aquellas zonas, en las que el desarrollo industrial no alcanzó el auge suficiente como para romper con el modo de vida tradicional, donde más tiempo se ha perpetuado la molienda.



 Lámparas de alta potencia más antigua y conocida de todo el mundo. Nuestras lámparas, resultado de una larga tradición, son ampliamente apreciadas tanto por su brillante luz como por su imponente aspecto exterior. Una lámpara de alta potencia Petromax convierte la noche en día.
El nombre Petromax se remonta al Consejero Comercial de
Cámara Max Graetz, que inventó la lámpara a principios del S. XX. Sus amigos le apodaron "Petroleum Maxe", de lo que derivó la abreviatura Petromax. El 05-11-1910 el nombre fue legalmente registrado. Durante los años siguientes, la lámpara se convirtió en un éxito de ventas por excelencia. Se fabricaron millones de unidades, que fueron distribuidas por todo el mundo. Desde entonces, el cilindro de cristal montado en la lámpara ha sido fabricado por el grupo Duran (antiguamente llamado Schott). Se trata de un cilindro altamente resistente al calor y fabricado a partir de cristal borosilicatado.
Hoy en día, la lámpara, que consta de más de 200 piezas y es montada a mano, sigue cautivando a los usuarios. Las barcas pesqueras iluminan su captura nocturna gracias a la impresionante potencia lumínica de 400 vatios, y los trotamundos siguen reuniéndose cobijados en su luz para compartir historias.
En mi caso la utilizo de ornamentación.

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